EFE
El Gobierno de Venezuela anunció este sábado que en los próximos días celebrará una reunión de alto nivel con el Ejecutivo de Guyana para abordar el litigio territorial entre ambos países, atendiendo propuestas hechas por el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac).
En un comunicado, Caracas informó en ese sentido de recientes conversaciones del presidente Nicolás Maduro con Lula da Silva, así como con el primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves -quien ocupa la Presidencia de la Celac-, y el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres.
«En dichas conversaciones se recibió la propuesta de realizar una reunión de alto nivel con Guyana, que será anunciada en los próximos días, con el fin de preservar nuestra aspiración de mantener América Latina y el Caribe como una zona de paz, sin interferencia de actores externos», reza el comunicado.
Venezuela, que el domingo pasado aprobó en un referendo unilateral anexionarse la zona en litigio, ha asumido la convocatoria a esta reunión «con beneplácito y compromiso».
En el escrito también se señala que, en las conversaciones con Lula da Silva y Gonsalves, Maduro ratificó «la posición histórica sobre los incuestionables derechos» de Venezuela sobre la Guayana Esequiba, el área de casi 160.000 kilómetros cuadrados en disputa, controlada por Georgetown.
Sobre la conversación con Guterres, el texto indica que el secretario general de la ONU «se comprometió en impulsar los esfuerzos en favor del diálogo directo entre las partes» y «recordó que siempre ha ofrecido sus buenos oficios para la solución de la controversia», que data del siglo XIX.
Este pleito ha cobrado vigor desde 2018, en vista de la admisión del caso por parte de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), que ha pedido a Venezuela no completar acciones que alteren la dinámica actual sobre el área, administrada por Guyana.
Sin embargo, Maduro rechaza la mediación de la CIJ en este asunto, un alegato que también se vio reforzado con el referendo, en el que los venezolanos acordaron no reconocer la jurisdicción del tribunal internacional que, de cualquier modo, emitirá una decisión vinculante para las dos naciones en los próximos meses.
Composición fotográfica: El País