La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) está buscando sustitutos para los equipos rusos que hasta ahora ha utilizado para sus misiones espaciales. Las sanciones a Rusia le impiden seguir comprando los cohetes Soyuz, que se usan para lanzar cargas medianas a la órbita.
En ese contexto, la agencia europea se plantea recurrir a Elon Musk como proveedor y, en concreto, a su empresa espacial SpaceX. El director de la ESA, Josef Aschbacher, afirma que están barajando incorporar nuevos vehículos de lanzamiento y que una de sus opciones entre «las dos y media que barajan» es la del multimillonario. Las otras alternativas pasan por adquirir los cohetes a Japón o India.
El inicio de la guerra de Ucrania ha supuesto el fin de la colaboración espacial entre Rusia y Occidente. Una de sus consecuencias ha sido la cancelación de los despegues en los que participa Moscú, directa o indirectamente. En marzo, 10 de los 18 despegues previstos para 2022 y 2023 quedaban cancelados. En cuanto a los ocho restantes, seis cuentan con la tecnología de SpaceX.
El principal beneficiado de esta situación ha sido Elon Musk, cuya empresa SpaceX se ha quedado prácticamente sin rivales de la noche a la mañana. Ahora, la ESA ha reconocido que está estudiando la compatibilidad técnica con los cohetes de Elon Musk, aunque de momento no han entrado en negociaciones.
Con información de ElEconomista.