El dirigente político carabobeño, Armando Amengual, señaló que es insostenible para empleados y pensionados continuar sobreviviendo con un salario mínimo de 5 dólares, por lo que exhortó al Ejecutivo Nacional a retomar el anclaje del mismo, al petro.
“Han pasado cinco años desde que Nicolás Maduro engañó a los venezolanos afirmando que el salario mínimo estaría anclado al petro y que se ajustaría en simultáneo con este criptoactivo”, recordó Amengual, quien sostuvo que la política económica del gobierno nacional ha fracasado hacia los trabajadores.
Explicó que actualmente el petro se ubica en 60 dólares y al respecto planteó que el salario mínimo pueda ubicarse en al menos uno o dos petros, equivalentes a entre 60 y 120 dólares americanos.
“En 2018 se acordó que el salario mínimo se ubicara en medio petro, equivalente a 30 dólares. Pero ese salario finalmente fue fijado en Gaceta Oficial en bolívares y la inflación lo pulverizó. Desde ahí, cada incremento anunciado por Nicolás Maduro en los últimos años, se ha vuelto nada”, señaló.
Además, mencionó que durante años, desde el Gobierno de Maduro “culparon a un supuesto dólar criminal de acabar con la economía y los salarios, pero la realidad es que hoy, el dólar oficial del Banco Central de Venezuela, que maneja Nicolás Maduro, es el que continúa pulverizando el ingreso de la familia venezolana”.
Recordó que actualmente el salario mínimo, según la tasa oficial del Banco Central de Venezuela, se ubica en 5,3 dólares, mientras que la canasta alimentaria alcanzaba en diciembre los 371 dólares, según cifras del Observatorio Venezolano de Finanzas. “Nadie puede vivir con 5 dólares al mes”, insistió.
“Una familia venezolana necesita 70 salarios mínimos para cubrir sus necesidades de alimentación y esa es una realidad innegable, a la que se suma una inflación anualizada de 440% al mes de enero, porque todas las políticas económicas fracasaron”, precisó.
Destacó que el país se enrumba ante un inminente regreso a la hiperinflación, tal como han alertado expertos económicos, “y en el medio, hay un país entero que clama unidad y soluciones, que está cansado de politiquería y excusas, y que espera acciones serias por parte de todos para recuperar el poder adquisitivo ante un escenario que podría ser igual o peor al que ya vivimos entre 2015 y 2017”.
