Más de 15 días han transcurrido desde la tarde del deslave como consecuencia de las fuertes lluvias acaecidas en los sectores El Castaño y Palmarito, ubicado al norte de la ciudad de Maracay, estado Aragua, lo que originó el desbordamiento de quebradas y ríos en el lugar, arrastrando enormes piedras, lodo y árboles.
La destrucción de ambos sectores se viralizó en las redes sociales, cuando miles de usuarios mostraban una inmensa avalancha que a su paso dañó viviendas, vehículos y sobre todo dejó un saldo negativo de pérdidas humanas.
El párroco de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús, Noél Galindo Castro, quien tras el deslave coordina el centro de acopio adonde llegan las ayudas mancomunadas de todos los voluntarios, empresas privadas y de la red de Cáritas de Venezuela, así como de otras iglesias, dijo que «la misericordia de Dios es inmensa y no abandona a su pueblo».
Reconoce el trabajo que están realizando en unión cívico militar el gobierno nacional, regional, municipal, los consejos comunales, voluntarios, rescatistas, fuerzas policiales y todas las Iglesias de diferentes ámbitos de la fe, en el que se tiene una sola dirección, que es el bienestar y tranquilidad para todas esas familias que perdieron a sus seres queridos y propiedades.
«Aún falta mucho, pero no estamos solos, el venezolano es solidario en estos momentos difíciles, invitamos a seguir contribuyendo con las donaciones de agua potable, desinfectante y artículos de higiene personal como jabón, papel sanitario, crema dental, detergente, entre otros, para quienes puedan hacerlo deben dirigirse a la Iglesia en El Castaño o en los centros de acopio autorizados.
Edición del texto: Jorge Isaac Jiménez Flores
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Información: vía Jacinto Oliveros / Instagram y Twitter @jacin44
Fotos: Jacinto Oliveros
