El Gobierno de EEUU se dispone a conceder a Chevron una nueva licencia de actividad mínima en Venezuela, informan medios locales este lunes, día previo a que expire el actual permiso concedido por Washington a la petrolera para que opere en el país suramericano.
Esta licencia, similar a la que la empresa tenía antes de que en noviembre de 2022 el Gobierno de Joe Biden se la ampliara, permitirá operaciones esenciales de mantenimiento, pero prohibirá nuevas inversiones y la exportación de crudo, explican a Yahoo Finance fuentes cercanas al asunto que piden anonimato.
El vencimiento de la actual licencia de la que dispone Chevron supone en todo caso un duro golpe económico para Venezuela, ya que la petrolera había contribuido de forma clave a la reactivación de su producción de crudo tras las sanciones impuestas por Washington durante el primer mandato (2017-2021) del presidente Donald Trump, que entonces concedió solo estas actividades esenciales a la empresa.
Chevron enfrenta restricciones en Venezuela
El pasado miércoles el secretario de Estado, Marco Rubio, hizo público que el Gobierno no renovaría la licencia de operación, contradiciendo lo dicho poco antes por el enviado especial estadounidense Ric Grenell, que afirmó que el permiso se renovaría después de que lograra pactar con Caracas la liberación, la semana pasada, de un estadounidense detenido en Venezuela.
Detrás del cambio de parecer en el Gobierno se sitúa, según medios como Axios o The Washington Post, la presión de tres congresistas de origen cubano, María Elvira Salazar, Carlos Antonio Giménez y Mario Diaz-Balart, que supuestamente amenazaron la semana pasada con bloquear en la Cámara de Representantes el plan de reforma fiscal impulsado por Trump si no se dejaba caducar el permiso de Chevron.
Información y foto: EFE