Llegó el momento de Manu Ginóbili para ingresar al Salón de la Fama, ya directamente con ovaciones apenas lo nombró Ahmad Rashad. Palabras de Gregg Popovich, Dirk Nowitzki y Tim Duncan se pudieron ver en el video de introducción. «Él era un genio en el caos», dijo Duncan.
Manu es presentado por Tim Duncan, a quien bromeó con «¿estás seguro que no preferís hablar vos?». Continuó Manu: «Estoy acá por haber sido parte de un equipo, uno de los más importantes de los 2000, no por los logros individuales, y por haber ganado el oro con Argentina y la Euroliga. Pero hoy también quiero hablar de los equipos que no fueron tan exitosos y fueron pasos para llegar hasta aquí. Todo comenzó a los seis, siete años, en Bahía Blanca, a una cuadra de casa (…) fue un gran lugar para desarrollarme. Ahi jugué hasta los 18 años y me convertí en profesional».
«Jugué en Andino de La Rioja, después en mi ciudad con mi hermano Sepo. Durante mi crecimiento gradual estuve siendo parte de los equipos de la Selección y después Italia, con Reggio Calabria, ellos confiaron en mí y tuve grandes líderes. Después el salto a Virtus Bologna, donde Ettore Messina me enseñó muchísimo, muchas gracias coach. La experiencia italiana fue muy valiosa para mí, me convertí en el jugador que fui en la NBA y también en el hombre que fui«.
«Fueron 16 años en San Antonio, 16 años jugando para el mismo entrenador, representando a los mismos colores, la misma ciudad. Tantos amigos, tantas experiencias increíbles. Pop, que puedo decir sobre tí. Fuiste tan, tan importante para mí y mi familia, nunca podré agradecerte lo suficiente. Pude jugar con uno de los mejores de la historia; Tim, aprendí de vos cómo ser un ejemplo en la cancha. TP (Parker), nunca dejamos que nuestros egos generen peleas, sabíamos cómo repartir nuestro tiempo, que al principio el mio era menos. Juntos ganamos muchas cosas, pero para ganar un campeonato se necesitan un montón de piezas y las tuvimos».
Aquí están algunos de ellos. Bruce Bowen, vos hacías más fácil mi trabajo. Matt Bonner, donde sea que estés, fuiste un gran compañero. Patty (Mills), Tiago (Splitter), Bobo (Diaw). Fabri (Oberto), fuiste mi compañero ideal. Y más de 100 nombres más. Les agradezco a todos. Amé compartir equipo con ustedes, esas cenas, ganar y perder juntos fue fantástico».
Manu también agradeció a muchas más personas de los Spurs, desde los directivos hasta los analistas de video. «RC Buford, gracias por elegirme». «A la ciudad, a la comunidad, gracias a todos».
«Lo más increíble de mi carrera es que al mismo tiempo que estaba con los Spurs tuve una fantástica carrera con mi Selección, igual de divertida, igual de exitosa».
«Siempre lo hicimos todo como equipo. Aprecio cómo estuvimos tanto tiempo juntos, los campeonatos, las conversaciones, los desayunos, el jetlag. Eso es más que amistad, eso es hermandad. Ojalá tengamos más aventuras fuera de la cancha».
«También agradezco a la NBA por darnos este gran contexto para hacer lo que amamos, esta es la mejor organización deportiva del mundo».
«A los fanáticos, gracias por su pasión, sentí su amor en cada día».
Manu se guardó lo mejor para el final. En español, se tomó un momento para agradecer a los más íntimos, a su familia más cercana, en medio de lágrimas y la voz quebrada.
«Sepo y Lea, gracias por aclarar mi camino, mi inspiración, me empujaron de chiquito a ser como ustedes. Papá, cómo me hubiese gustado que estuvieras acá, poderte tener en lo que está pasando hoy, mi primer fiel seguidor, te extraño mucho, viejito. Mamá, sé que estas mirando. Me llevo tener tres hijos varones entre los sacrificios, el amor, la libertad de elegir, gracias».
«Many, Luca, Dante y Nico, si tuviera que elegir un momento para detener el tiempo, sería en todo el tiempo que viajamos juntos, amo cómo somos, los amo tanto».
«Gracias a todos por estar acá, por más aventuras juntos».
El inicio, con tributo a Bill Russell
Comenzó la ceremonia: el presentador Ahmad Rashad conduce el evento.
Jerry West y Alonzo Mourning subieron al escenario para rendirle tributo al mito Bill Russell, que nos dejó este año, por sus logros deportivos y todo su trabajo social fuera de la cancha. «Bill se fue dejando a este mundo mucho mejor de lo que era», afirmó Mourning.