El experto financiero y CEO de Gear Capital Partners, Jorge Piedrahita, señaló que considera poco probable que Estados Unidos otorgue nuevas licencias a empresas petroleras para operar en Venezuela, mientras no se aclare la polémica por los resultados de las elecciones presidenciales, realizadas el pasado 28 de julio.
Consultado por Banca y Negocios, Piedrahita subrayó que en la actual situación del país es previsible que los bonos de la República y PDVSA sigan bajando mientras no se resuelva la situación política e institucional, pero el experto duda que se retorne a la prohibición de transar estos papeles «porque esa decisión perjudicó a muchos inversionistas estadounidenses».
Para el analista, ni América Latina ni Estados Unidos aceptarían un escenario de posible «cubanización» de Venezuela, por lo que estima que «las presiones internacionales sobre el gobierno de Maduro pudieran aumentar y Estados Unidos podría endurecer el régimen de sanciones, pero de una manera progresiva».
La primera señal parece ser la imposición de nuevas sanciones individuales a dirigentes oficialistas, según señala una nota de Reuters.
En opinión de Piedrahita, las negociaciones seguirán abiertas, pero en condiciones más difíciles, ya que el presidente Nicolás Maduro habría violado acuerdos pactados con Estados Unidos sobre la calidad democrática del proceso electoral.
Consultado sobre si las licencias concedidas hasta ahora por Estados Unidos podrían ser levantadas, especialmente la de Chevron, Jorge Piedrahita considera que la situación en Venezuela tendría que hacerse muy compleja para llegar a eso.
En opinión del analista, si se llega a esa situación se comenzaría por las licencias más recientes. «El gobierno de Estados Unidos evaluará paso a paso la situación venezolana para administrar las sanciones».
«En un escenario de sanciones más estrictas volvería a ser muy difícil que se recupere la producción petrolera. Las expectativas sobre Venezuela se pueden deteriorar y eso influye en el rendimiento de los bonos», indica Piedrahita.
Reestructuración en stand by
Consultado sobre la situación de la deuda externa venezolana, que el Think Tank venezolano Cedice Libertad estima ya en más de 160.000 millones de dólares, el experto financiero Jorge Piedrahita estima que sin una solución clara a la situación política del país.
«La reestructuración permanecerá en stand by, lo que generará más problemas y costos para Venezuela», sostiene.
Piedrahita explica que Venezuela no puede emitir nuevos bonos, porque está fuera del mercado financiero internacional, pero habría que ver si efectivamente Maduro estaría interesado en eso, por ahora, porque su prioridad es mantenerse en el poder.
Una reestructuración implica costos, porque el gobierno tendría que comenzar a pagar y, sin duda, ese no es problema que Maduro quiera enfrentar ahora.
El punto es que mientras más se aleje la posibilidad de reestructurar la deuda, en unas condiciones políticas que no hacen más que complejizarse, los costos del proceso se harán muchísimo más elevados.
Para el analista financiero, la percepción sobre el gobierno de Nicolás Maduro en los mercados financieros es «muy negativa», y en la situación actual esa imagen no plantea escenarios económicos y financieros para nada positivos para Venezuela, apunta el experto.
Información de Banca y Negocios
Foto: Banca y Negocios